Del Verdadero Poder Del Pueblo

El Acuerdo Que Se Firmará En Cartagena

 Por Freddy Vargas Periñán

En lo único que no estoy identificado con lo pactado en la Habana, es con el nombre que le han dado: “Acuerdo De Paz”. Pienso que es un acuerdo pero entre las FARC y el Gobierno, porque el verdadero Acuerdo de Paz, lo tienen que hacer los del E.P.L, Bandas Criminales, Paracos, Grupos de ultraderecha, y principalmente, los líderes políticos generadores de violencia a través  de la corrupción, como también las Iglesias, Militares, Jueces,  Magistrados, gremios, empresarios, trabajadores, estudiantes, pensionados, etc. 

Cuando esa concertación se dé, entonces podremos decir “Acuerdo General de Compromiso Para Llegar a la Paz”. 

En Colombia, no solamente el que tiene las armas, genera violencia, nos estamos acostumbrando a la ilegalidad y ojalá esta mal llamada “cultura” sea erradicada de nuestro entorno. 

Referente al Acuerdo con las FARC, es algo que favorece a la ciudadanía.  Los que están en los estratos 4, 5, y 6 podrán disfrutar de bienes y seguridad, visitarán sus fincas con familias y amigos, costumbre  que se había  perdido, y los del estrato 1, 2 y 3 estarán mas tranquilos, pues hijos, nietos, sobrinos y amigos en el servicio militar, van a correr menos peligro, los jefes guerrilleros disfrutarán sus últimos años en familia, y los de base, podrán integrarse a la sociedad.  Es decir, todos ganamos, por esa razón voy a votar por el Sí. 

No soy Uribista ni Santista, ni de Izquierda, ni derecha, pero si queremos cambiar y no seguir en lo mismo, (y en esto, el más equivocado es el Centro Democrático que con su comportamiento da a entender que no quiere la Paz) hay que tomarnos este pacto muy en serio. 

Si ustedes leen los puntos principales del Acuerdo, y las exigencias de las FARC, notarán que lo que piden al Gobierno, es mejorar las carreteras para sacar los productos del campo, mejor tratamiento al individuo, créditos blandos y tierras para la siembra, mejoramiento en salud y educación. 

       

Freddy Vargas Periñán      

En todo este proceso muchos creen que nos va a pasar lo mismo que Venezuela, que nos convertiremos en un gobierno Castro-chavista, pero lo que va a suceder es que Maduro, quedará con menos amigos, como si los tuvo Chaves cuando fracasó en su primer intento golpista. 

Si gana el No, Maduro quedaría fortalecido, las FARC simpatizan con él. 

No caigamos en el engaño  de los políticos que desde ya enfilan baterías para las elecciones de la Presidencia en el 2018; Espero que reflexionen y salgan a votar el Plebiscito, demostremos que aún nos interesa Colombia, para que nuestros hijos y nietos tengan un mejor país en el futuro. 
 

El poder Superior Detrás De La Contraloría...

POR LA SENSATEZ Y EL RESPETO

Por Álvaro Morales

Muchos creyeron que el Concejo de Cartagena se había renovado, ignorando o no queriendo reconocer, que la mayoría de los “nuevos”, procedían y fueron elegidos, unos, con votos de casas politiqueras, cuyos miembros no solo han sido cuestionados sino sancionados; y otros, como representantes de grupos económicos interesados más en la contratación pública que en el trabajo por la ciudad. 

Los “honorables” de la supuesta renovada Corporación se estrenaron acolitando los errores de procedimiento en que incurrieron los anteriores en cuanto a la elección y/o escogencia de la persona que se desempeñaría como Contralor Distrital.  

Obviamente, la irresponsabilidad e insensatez de estos “Honorables” no solo ha repercutido en el fallo de suspensión a dieciséis de ellos sino contra la institucionalidad y administración de la ciudad.  

Los argumentos de defensa, además de baladíes y desviados de lo preceptuado por las normas, dejan ver a las claras que necesariamente tuvo que haber un “poder” superior que llevara a los Concejales a insistir en el prevaricador procedimiento de elegir en el ente fiscalizador a una persona que no se encontraba habilitada para conformar la cuestionada terna.  

La irresponsabilidad de los “renovados” los llevó a no medir las consecuencias que por sus actos no solo podrían ser separados de su curul sino que dejarían a Cartagena sin la posibilidad de tramitar proyectos importantes en virtud a la norma constitucional que no permite que sean reemplazados mientras estén suspendidos.  

Ahora, en virtud de la sensatez, la persona elegida como Contralora, motivo del problema, debería por el bien de la ciudad, dar un paso al costado y renunciar; contribuyendo con ello a mejorar la deteriorada institucionalidad del Distrito; no importando los compromisos personales, politiqueros o económicos que llevaron a imponerla como tal.  

Por otro lado, también las insensateces e intereses burocráticos de Magistrados y Congresistas impedidos para votar, conllevaron a reelegir sin escrúpulos jurídicos ni éticos al hoy ex procurador, Alejandro Ordóñez. Primaron los favores personales sobre la pulcritud. 

             

     Álvaro Morales              

Otra insensatez es ver a nuestro gobernador desgañitarse por el SÍ al Acuerdo de Paz mientras incumple “su promesa” a las niñas enfermas de El Carmen de Bolívar; que nada hace en controlar la defraudación en la salud; que engaña al deporte contratando deportistas de otras regiones para “sacar pecho” de logros y medallas; y que además, retrasa el pago a los pensionados.  

La sensatez, hace parte del respeto por la gente y el Estado.  

La sensatez, tendrá que ser, necesariamente, parte importante de la actitud que asumamos los colombianos como valor indiscutible para la paz y la reconciliación en los nuevos escenarios que surgirán con la firma del Acuerdo de Paz.  

A los que administran el gobierno, pedimos respeto y mesura en sus actos, en sus decisiones, que depongan sus intereses personales a los intereses públicos. ¿Será mucho pedir? LC

Del 15 al 18 de Septiembre de Aniversario

Iglesia Emmanuel de Boston

De La Cultura de la fe y la Creencia en un Dios Todopoderoso

Por Gilberto García Mercado  

                                                                   La Génesis de Boston

Pastor Manuel Octavio Villeras

Al principio la comunidad lo veía como un personaje más que por alguna u otra circunstancia venía a Boston a cumplir alguna diligencia. 

A veces aparecía lloviera o escampara por las calles del barrio siempre con una palabra de aliento para el que estuviera enfermo o el que no encontrara una luz en la oscuridad de sus problemas no cometiera una locura.

No creíamos en ese momento que sus visitas dos o tres veces por semana con una biblia bajo el brazo en su acuciosa misión de llevar “Las Buenas Nuevas de Salvación” le duraran tanto en el optimismo. 

Sin embargo, el hombre de contextura fuerte, de un metro con setenta, y de un delgado bigote poco a poco se fue haciendo imprescindible en Boston hasta el punto que hoy nadie se atreve a iniciar un proyecto de vida si no le solicitan al Pastor Manuel Octavio Villeras que ore o interceda ante Dios para que el proyecto se materialice y el enemigo huya de sus vidas. 

En esa misión de conquistar almas para Jesús, lo secundaba una joven bajita pero siempre con una sonrisa que con megáfono en mano invitaba a los vecinos a los cultos en las esquinas y se derramaba en atenciones con los niños. Hoy Heymy de la Barrera se goza cuando da sus testimonios de cómo la Iglesia Emmanuel es una realidad en Boston. 

El Mejor Barrio de Cartagena 

“No fue fácil una relación directa con la comunidad”, reconoce el Pastor Villeras cuando ministra los jueves y domingos en la iglesia, “Algunos hermanos de otras congregaciones me decían que Boston era una “comunidad dura”, pero yo les decía que si Dios me envió aquí, heme aquí señor”. 

Así las cosas, el hombre que veíamos dos o tres veces por semana, y ante el que algunos se predisponían por el solo hecho de predicarles la Palabra de Dios, terminó siendo una figura casi que paternal para los jóvenes y de completo respaldo espiritual para la comunidad en general. Se comenzó a ver el respaldo de Dios en la medida en que la gente confiaba en un Dios Omnipotente. 

Son muchas las anécdotas y los testimonios que cada domingo la gente proclama en el púlpito. Es evidente que la zona es considerada vulnerable y de alto riesgo. Hay pobreza y carencia de cosas elementales, la mayoría de la población deriva su sustento de trabajos informales en el mercado de Bazurto. 

Además se tiene que lidiar con los problemas de estigmatización por el solo hecho de vivir en Boston, las empresas de mensajería, los taxis, cualquier diligencia que implique visitar el barrio y sus alrededores recibe por parte del interlocutor un rotundo, “no, a Boston no entraría ni por todo el oro del mundo”. Respecto a tal situación, el Pastor Manuel Octavio Villeras lo tiene bien claro: “Bienvenidos al mejor barrio de Cartagena: Boston”, declara siempre y cuando el invitado a predicar en la iglesia Emmanuel sea un evangelista que viene del exterior. 

Carolan Barboza, Pastora, y Sharay Villeras, su hija

De aquella concientización entre la población, de los frutos de diez años predicando la palabra de Dios, hoy se pueden recoger los frutos. Muchas personas de la comunidad han dado un cambio ejemplarizante hacia las cosas de Dios, se puede observar para testimonio no solo de los residentes sino de quienes llegan a visitar el sector que para Dios no hay nada imposible, solo hay que dejarse llevar por lo que Él enseña en su palabra, serle fiel y Él se ocupará de tus cosas. 

Este 15, 16, 17 y 18 de septiembre el cielo va experimentar una gran fiesta pues la Iglesia Emmanuel de Boston celebra su aniversario: dos años de haberse ordenado en iglesia, la comunidad experimentará milagros y prodigios, liberación, gozo, reconciliación en los hogares y transformación en una nueva criatura si recibes a Jesús como tu Salvador personal, pero sobre todo, lo más importante: ¡Solo si tienes fe, hermano¡

Puntos de Vista en el Arte

Una Diatriba Contra El Pintor Ángel Loochkartt 

Por Octavio Mendoza* 

La distancia que media entre la visión artística normal de los espectadores del arte y el análisis de una persona en su papel de perito del arte bien puede desenmascarar intenciones que ponen en duda el papel de esos intermediarios de opinión. 

Es lo que sucede con el pequeño artículo de Ana María Escallón acerca de la exposición de Ángel Loochkartt en el Museo de Arte Moderno, MAMBO. 

Comienza revolviendo “macarrones y queso” para despotricar un hecho cultural que ya por su copiosa asistencia, más de novecientas cincuenta personas en la noche de su inauguración el pasado veinticinco de agosto, demostraba el gran ascendiente de Loochkartt entre el público colombiano. 

Al comenzar la señora Escallón calificando el Carnaval de Barranquilla como “explosión de permisividad”, insultó a la ciudad que lo creó, y se puso en contra de un evento hecho para la gente y por la gente de la ciudad como un encuentro de la emoción. 

Congo Gritando

No le compete a la señora Escallón, ni a nadie, con sus opiniones, intentar cambiar la intensidad propia del color, la exaltación y la gracia que acompañan ese evento multicultural, junto con la libertad dionisíaca propia de todo carnaval. 

A la señora Escallón le parece “impresionante” que Loochkartt, retome las anteriores características como fuente de inspiración, y que lo haga a sus ochenta y tres años. Agrega que no le parece “interesante” que el pintor interprete lo que ella llama “algarabía vulgar donde prima la muchedumbre desenfrenada”, junto con su sexualidad y erotismo. 

Señora Escallón: ni a usted, ni a nadie, le corresponde convertirse en carcelera del concepto pictórico que Ángel Loochkartt encarna como hijo de Barranquilla, y como pintor formado en Europa dentro del expresionismo y la transvanguardia italiana. 

Tampoco corresponde a nadie determinar cómo, y con qué nivel de pasión y entrega se deben manifestar los ciudadanos asistentes al evento de masas del carnaval icónico de la ciudad, no sólo el más importante de Colombia, sino el segundo más grande del planeta, tras el de Río de Janeiro. 

Ana María Escallón, Crítica de Arte

El gran artista Ángel Loochkartt, distinguido por la Universidad Nacional como catedrático emérito, es, entre otros propósitos, el mayor intérprete de la plasticidad multifacética del Carnaval de Barranquilla a través de su pintura, pero su gran obra figurativa le parece a Ana María Escallón “aguda y perversa”, “carne en movimiento”, y, según ella, sólo incluye “manchas de color alegres donde se siente el vértigo de una multitud desenfrenada”. Se deduce de esto que los carnavales, según ella, deben ser “juiciosos” y ordenados, y que ella tampoco puede soportar el expresionismo desenfrenado de Kirchner, ni las brujerías de Goya, ni las pinceladas “perversas” de Kokoschka y Bacon; tampoco los desfile burlescos de Otto Dix ni las mascaradas diabólicas de Ensor. 

Está claro que, al contrario de lo que se deduce del artículo de la señora Escallón, Colombia es emoción, desparpajo, improvisación, danza terrígena y selvática, eco marino, trascendencia del color desenfrenado y vital. 

Si a la señora Escallón le molestan “las insinuaciones de los viejos tiempo de la esclavitud”, y “las insinuaciones perversas de mentes eróticas” que aparecen en la pintura de Loochkartt, es lógico que le parezca “basura” su pintura expresionista y la ruptura con la teoría del color propia de ésta y del Carnaval de Barranquilla. 

Sólo así se comprende que esté de acuerdo con la nueva directora del Museo de Arte Moderno, quien confirmó que allí no puede entrar una pintura que considera sin vigencia, como la de Loochkartt, según la Escallón, aunque las más de novecientos cincuenta personas que asistieron a la inauguración nocturna de su exposición en el museo de Arte Moderno de Bogotá iban en búsqueda de su pincelada poderosa, personal, intuitiva. 

De los Hábitos Eróticos de Las Mujeres Etruscas

Como lo sabe el crítico mundial Achille Bonito Oliva, Ángel Loochkartt ya entró en la historia del arte americano como intérprete de la vida y de un momento crucial de la pintura del siglo veinte, más allá de las opiniones de museísticos funcionarios temporales que sólo aceptan como algo inclusivo la postmodernidad norteamericana. Nadie niega las potencialidades de este movimiento cultural, pero su prevalencia en el mundo no puede llegar a tener la preeminencia de un absoluto excluyente.  

* Tomado de Con-Fabulación. No. 429 

DE INTERESES Y PERJUICIOS

LA REFORMA RURAL INTEGRAL

EN "EL ACUERDO DE PAZ"

Por Álvaro Morales

        

El actor y productor de cine y televisión de origen italiano, nacionalizado colombiano, Salvo Basile, nos recuerda en una de sus columnas de un diario capitalino, que sólo el 1,6 % de la población colombiana es poseedora de más de la mitad de la tierra. 

Y es que ese bajísimo número de “compatriotas” que acapara la mayor parte de la propiedad de la tierra son los latifundistas y terratenientes que por obvias razones son los que se oponen al Acuerdo de Paz, en especial al Primer Punto de la Reforma Rural Integral, y sobre todo, al componente que trata sobre la democratización y uso de la tierra. 

En gran parte, ha sido la inequidad en la propiedad, tenencia o posesión de la tierra el núcleo de los grandes conflictos que ha sufrido y sufre el país; siendo el despojo bajo presión y violencia, las formas como muchos campesinos han sido desarraigados no sólo por los diferentes grupos alzados en armas, sino, también, por grandes terratenientes y latifundistas que disfrazados se cobijan bajo el amparo de gremios del sector, y del poder político que han ostentado. 

Hasta ahora, muchas han sido las zonas rurales de Colombia vedadas a la paz. Con masacres y presiones armadas, pequeños productores de pancoger  fueron despojados y desarraigados de sus predios. 

Se propone entonces el componente de Democratización y Uso de la tierra, contenido en el primer punto del Acuerdo, el de la Reforma Rural Integral, luchar contra la ilegalidad en la posesión y propiedad de la tierra, evitar el despojo, y levantar una Carta Catastral Rural, inexistente en la actualidad, la cual conllevará a que los grandes propietarios tributen al Estado de acuerdo a la extensión de tierras que posean; y por las cuales nunca han contribuido impositivamente con la jurisdicción municipal a la que pertenecen. 

Se entiende entonces las razones por las cuales dichos contradictores cobijados en curules de partidos de oposición se desgañitan tratando de convencer al pueblo sobre las inconveniencias del Acuerdo incitándolo a votar por el NO en el plebiscito del 2 de octubre. 

Álvaro Morales

Y es que una vez implementado el Acuerdo, a terratenientes y latifundistas no sólo tocará pagar impuestos por la totalidad de sus predios, sino que tendrán que restituirlos, si es que no pueden demostrar la manera legal cómo los adquirieron. 

Finalmente, contempla el primer Punto del Acuerdo, entre otros aspectos, atacar también el latifundio improductivo, el cual es predominante entre los que poseen grandes extensiones de tierra. 

Seguramente, cuando estos tributos comiencen a ingresar a las arcas de cada municipio, que se esperan sean manejados con pulcritud, servirán para la reivindicación de las paupérrimas condiciones y mala calidad de vida de los habitantes de estas zonas del país. LC