“CASAS PA´ MI GENTE”

No solamente se requiere de buena voluntad

Por Alvaro Morales

Con los resultados de las inscripciones en el programa “Casa pa´ mi gente” de la población sisbenizada en Cartagena, ha quedado al descubierto y desvirtuado el supuesto déficit de cincuenta mil viviendas del que se ha venido hablando, repititivamente, incluso, desde anteriores administraciones de la ciudad. 

De los 135.492 inscritos en la jornada; probablemente como admitidos queden 120.073, luego de depurarse el listado por erróneo y el rechazo de 15.419. 

Si se tomare la cifra de los que posiblemente queden como admitidos, ésta  representaría el 16%  de los 736.089 vinculados o beneficiarios registrados en la base de datos del Sisbén. 

Indiscutiblemente es inmensa y descomunal la deuda que tiene el Gobierno Distrital con la población pobre y vulnerable de Cartagena, producto de la injusticia social de la que han sido víctimas desde hace años, no solo los màs pobres, sino la población en general. 

Aunque es manifiesto el entusiasmo y valerosa la iniciativa del actual gobierno, de “Primero la Gente”, cierto es que la oferta de 972 viviendas, en este primer año, comienza a “mover la aguja” del déficit en el guarismo del 0,8%, si se tomaran los 120.073 admitidos. 

Tiene el alcalde Manuel Vicente Duque, y su equipo de gobierno, en especial el de Corvivienda, insistir con el Gobierno Nacional, con organizaciones privadas y filantrópicas, y aún, con gobiernos extranjeros, en la búsqueda de recursos económicos para seguir “torciéndole el pescuezo” a la crisis habitacional de la ciudad, que no sólo afecta a los grupos más vulnerables sino a todos en general. 

Algo curioso y preocupante de las cifras conocidas, de “Casa pa´ mi gente”, es que discriminados por actividad económica, el número de los que acudieron y quedaron como solicitantes, se refleja prácticamente con mucha similitud entre los clasificados dentro de los grupos de empleados, desempleados e independientes; los cuales representaron el 35, el 28 y el 33%, respectivamente. 
Otro importante dato es que mientras las mujeres acudieron en número representando el 69%, los hombres lo hicieron en solo el 31%; algo con lo que se denota el estado actual del núcleo familiar cartagenero; condición que pueda estar reflejando la crisis social que nos afecta. 

                   

         Alvaro Morales            

No podemos sustraernos tampoco acerca de la evidente situación económica de los cartageneros, en este caso, de la población sisbenizada, la cual en porcentaje del 61% acudió en búsqueda de solución habitacional con subsidio total; mientras solo un 39% lo hizo con el aporte de subsidio parcial.  

Ha iniciado entonces el alcalde Duque Vásquez  y Corvivienda la mitigación del déficit habitacional que desde tiempos atrás ha estado enmarcado en reiteradas promesas incumplidas por gobiernos anteriores; no olvidando que dentro de los no clasificados como población vulnerable, también existe un importante déficit en cuanto a estas necesidades.