NO ENSUCIÉIS EL
PERDÓN
«Cuando el poder del amor
Sea más grande que el amor
al poder,
el mundo conocerá la paz»
JIMI HENDRI
Por Orlando Periñán Lombana
De hecho, sabemos que algunas cosas son admisibles y otras no.
El joven entonces opta por esconderse.
Hay cosas que se pueden hacer y otras no, con la aplicación de un juicio sano.
En Colombia está de moda el matar, secuestrar, violar, extorsionar.
Sin que cuando capturen al victimario, en la mayoría de los casos, las condenas sean ejemplarizantes para que los criminales lo piensen dos veces antes de reincidir.
Y no pasa nada…
Ellos piden perdón en público y, «Listo el Pollo», como decía mi abuelo «Víctor"
Olvidando que en el récord de los pecados, que tiene el ser malo, la mentira ocupa el primer lugar. Así que ellos al pedir perdón— y lo vemos a diario en la televisión, sin el mínimo remordimiento en el rostro menos en la conciencia—avanzan un paso más en la solemne serie de televisión que contribuye a aumentar el prontuario criminal de los personajes aludidos.
Ellos saben que el pedir perdón en público, los beneficia para que la condena sea mínima.
¡Qué Horror!
Entonces uno se pregunta: ¿De dónde vienen tales motivaciones malsanas?
A lo que yo respondería: De la actual justicia, que es más condescendiente con los bandidos que con el afectado.
Y es que en los corazones impera la misma intensión maléfica, de no aplicar justicia equitativa.
Así que, no ensuciemos el pecado con falsos perdones, solo Dios sabe cuándo son verdaderos….LC
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